domingo, 30 de agosto de 2015

La familia Trapp

Los tiempos han cambiado.
¡Qué tiempos aquellos en que los emigrantes eran adorables cantantes, de diferentes edades, monísimos y además de piel blanca!. Me refiero a la encantadora familia Trapp. Uhmmmm, aquellos emigrantes molaban un montonazo.


Lo digo en serio, y es que me está afectando, pues lo considero una barbaridad humana, lo que está sucediendo en las costas de nuestro querido Mediterráneo (tan bien descrito por Joan Manuel Serrat en su canción y ahora llenita sus aguas de cadáveres) a los que hay que añadir esos interiores de camiones donde emigrantes engañados se asfixian por doquier. Pero comencemos por la peli "Sonrisas y lágrimas".


Una guerra, unas injusticias, un querer escapar y mejorar la condición. Eso es más o menos la synopsis de la peli de la que hablo. Toda una familia, con sus siete hijos, se lanzan por las montañas a escapar de la amenaza hitleriana. Si a eso le añadimos una buena música y unas montañas ideales, no cabe duda que el público quedó encantado e incluso emocionado, y sigue disfrutando con la cinta e incluso alguno soñó con verse algún día de emigrante haciendo gorgoritos en busca de alguna Suiza o similar.


Pero Hitler no vive en Siria, y Afganistán no hace frontera con el país helvético. Los emigrantes de ahora son así como menos molones que la familia Trapp. Y además no son europeos. Estos nuevos emigrantes,  además, si cantan por algún lado es por los sobacos, porque llevan días y meses sin estar en contacto con el agua dulce en condiciones. Sí, ese elemento que tu y yo abrimos una palanquita y la tenemos corriente en cualquier momento en nuestra casa. Ellos, la única agua con la que están obsesionados, es ese inmenso mar Mediterráneo (Quizás porque tu niñez sigue jugando en tu playa) que les separa de su esperada libertad y donde muchas veces su niñez se ve truncada en muerte. ¡Con las ganas que tendrían estos niños de disfrutar en playas juguetonas!


¿Y que se hace ante esta tragedia?


Poco o nada. Yo me limito a colaborar con las ONGs que las hay estupendas, pero a nivel gubernamental o europeo poco se hace. Por cierto: ¿la ONU es real o virtual? ACNUR se ha quedado corta. No da abasto.


Una pena, ya digo, la pasividad y sobre todo desidia de nuestros dirigentes a nivel local, europeo o mundial.


Pienso, que tras la primera guerra mundial, debieron haberse sentado las  bases para un mundo mejor, y lo que realmente se consiguió fue desembocar en la segunda guerra mundial. Tras la finalización de ésta, se debió hacer lo mismo y conseguir así un mundo más justo y...se ha conseguido esto: los países ricos son cada vez más ricos y los países pobres se hunden en la miseria. Algo está fallando.


No pido una revolución, pido simplemente justicia con esta pobre gente. Sé que es difícil, pero hay que intentarlo. Volvamos a salvar a la familia Trapp. ¿Entiendes Europa?


Santi
www.jmediciones.com















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