domingo, 6 de noviembre de 2016

1 de noviembre

Tal vez el 1 de noviembre sea un día normal para cualquiera de vosotros, y seguramente este día no tenga nada en especial. Aquí en España, era un día festivo, y espero que lo hayáis disfrutado. Pero para mí, este día ha sido distinto, un día especial.

Tras seis meses de trabajar sentado delante del ordenador, de pensar tramas y diálogos, de parir un guión, de sopesar situaciones, y buscar frases adecuadas, al final, el 1 de noviembre, y espero que con el aplauso del lector, he terminado de escribir mi quinta novela. Prueba superada.

Es increíble que un vago redomado como yo, haya podido acabar tantas novelas hasta la fecha. Qué gran momento el de todo escritor cuando acaba una novela. Qué bendición.

Esto de crear es genial. Unos crean hijos, otros empresas, y yo, que soy así como más sencillito, me limito a crear novelas, y la verdad, todo sea dicho, es que sobre todo, es una suerte el poder contar historias. Os contaré cómo pasó:

Estando con Ana en San Vicente de la Barquera, un pueblo precioso de España, vimos a una orquesta de verano, de las que nos gusta escuchar, de las que bailan y hacen bailar y además cantan espectacularmente al compás de los instrumentos, y viéndoles me dije: aquí hay matute. Líos, amoríos, trabajo de profesionales en todas las actuaciones y una gente entregada al espectáculo y al oficio de actuar. Como es habitual, vagueé durante un tiempo,  1 año exactamente, y más tarde me puse a escribir la novela.

Hablé con músicos, y hablé con sirios y gentes de las ONGs. Alguien se preguntará: ¿y qué pintan los sirios en todo esto?. Pues con todo lo que está pasando con los refugiados, y que me afecta tanto, qué menos que aprovechar mi novela musical para aproximarme al mundo del refugiado. Dicho y hecho. Es mi pequeño granito de arena para hablar del tema. Un tema que creo que la estamos cagando, sin discusión. Pero tampoco voy a buscar tu lamento o llanto, y  en todo momento, lo que he escrito, es una novela musical y donde el amor aparece y las paridas, como es habitual en mis novelas, también. Y estoy contento de cómo ha quedado. A ver si opinan lo mismo los lectores. Como tenga el mismo éxito que con las anteriores, www.jmediciones.com  me contento. Va por mis lectores y por los refugiados. Va por vosotros.

Qué ilusión, ahora comienza la corrección con mi editor, cosa que me encanta, y la preparación del libro y de su presentación, que yo creo, que podrá ser allá por primavera o antes incluso. Muy apetecible, y no porque aplaudan mi discurso en ella, (bueno, hasta ahora siempre lo hicieron) si no porque reúno a todos mis amigos, y eso no tiene precio. Va también por vosotros.

En fin, que estoy ilusionado, y eso es genial. Animo a los posibles escritores a lanzarse a publicar. Aunque no de apenas pasta ,aunque no seamos Cervantes ninguno, sino simplemente porque merece la pena esto de contar historias, y en eso consiste la vida. En intentar las cosas. Animo!!

Y volviendo al mundo que vivimos, ojalá que Trump, el americano, no sea elegido presidente. Suerte USA y suerte al mundo mundial. No merecemos esta clase de dirigentes. Que no salga elegido, por favor.

Pues eso, que paséis una semana genial, y por favor seguir comprando cupones del ONCE que es cosa buena. Y por favor...poneros a contar historias, que como he dicho: merece la pena. Suerte!
Besos y abrazotes
Santi






 

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